Sí!, estoy que reboso de felicidad, porque hoy se hizo justicia, porque al fin hoy ganamos una, porque al fin hoy la gente despierta de un letargo, porque hoy se demuestra que cuando se quiere se puede, porque hoy pensamos en nuestro futuro como nación y no en nuestros intereses, porque hoy se me iba a reventar el corazón de la arrechera al minuto antes de los resultados con tantas irregularidades, corrupción y trampa cuando otra vez sabíamos que eramos victoriosos, porque hoy esa diferencia no fué pequeña sino vasta pero aunque las cifras mientan igual ganamos nojoda!.
¿Por qué no te callas?... Ni cuando pierdes maldito!.
Gracias a aquellos quienes aún compartiendo preferencias rojitas tienen la materia gris y la visión suficiente como para entender que no se jugaba por un partido político, sino por las reglas que nos definen como sociedad.
Gracias a aquellos estudiantes (pues ya yo me gradué hace más de un año jeje) que demuestran claramente que SOMOS el futuro y que con esa misma fuerza y esos mismos valores, podremos ser la Venezuela que siempre nuestro pueblo con su belleza ha merecido. Una Venezuela donde la Cultura predomine y el Progreso no sea simplemente una palabra clave de una falsa promesa política.
Dios es Dios y aprieta pero no ahorca. Venezuela... aprende... que ahora nos falta camino por recorrer.
Hoy me lleno de esperanza, un sentimiento que tenía años sin sentir... esperanza en MI pueblo.
Se ganó una batalla, pero aún falta mucho para ganar la guerra. Pues lamentablemente aún seguimos en ella. Pero con más esperanza y con ella todo se puede.
Un abrazo mis pingüinos.
¿Por qué no te callas?... Ni cuando pierdes maldito!.
Gracias a aquellos quienes aún compartiendo preferencias rojitas tienen la materia gris y la visión suficiente como para entender que no se jugaba por un partido político, sino por las reglas que nos definen como sociedad.
Gracias a aquellos estudiantes (pues ya yo me gradué hace más de un año jeje) que demuestran claramente que SOMOS el futuro y que con esa misma fuerza y esos mismos valores, podremos ser la Venezuela que siempre nuestro pueblo con su belleza ha merecido. Una Venezuela donde la Cultura predomine y el Progreso no sea simplemente una palabra clave de una falsa promesa política.
Dios es Dios y aprieta pero no ahorca. Venezuela... aprende... que ahora nos falta camino por recorrer.
Hoy me lleno de esperanza, un sentimiento que tenía años sin sentir... esperanza en MI pueblo.
Se ganó una batalla, pero aún falta mucho para ganar la guerra. Pues lamentablemente aún seguimos en ella. Pero con más esperanza y con ella todo se puede.
Un abrazo mis pingüinos.
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